La primera Luna Nueva del 2024 se da en Capricornio en T cuadrada a los Nodos Lunares, a Quirón y en trígono a Urano.
Es una Luna que nos pide conectarnos con nuestro propósito de vida, con lo que hemos venido a aportar y materializar aquí en la Tierra.
Este proceso requiere que soltemos todas las cargas que nos hemos impuesto por lealtad familiar o social. Necesitamos ver qué es lo que hacemos desde un sentido del deber, desde la necesidad de sentir la aprobación de nuestro entorno y de la sociedad para conectarnos con el verdadero llamado de nuestro Ser.
Puede que al soltar lo que pensábamos que deberíamos ser y hacer tengamos crisis de identidad y vértigo frente a lo desconocido por lo cual es importante conectar con nuestra propia seguridad interna y reconocer nuestros dones y talentos que hemos venido a ofrecer al mundo.
Es un tiempo por un lado de estar en conexión con nuestra alma, pidiendo que se nos muestre el camino y estando receptivos a las señales de la vida y por otro lado estar en lo práctico, siguiendo y comprendiendo las leyes y los tiempos de la materia.
En este momento es favorable enfrentarnos a la vida desde el desafío, la aventura, saliendo de la zona de confort y atreviéndonos a seguir nuestras corazonadas y darles una base sólida cultivando la paciencia y la perseverancia.
La energía de Capricornio nos enseña a ponernos el reto de escalar hasta la cima de la montaña para que en el camino los desafíos nos ayuden a probarnos y a conocernos mejor y una vez arriba podamos tener una visión mayor de las cosas y del camino andado así como el por recorrer.
En este nuevo ciclo lunar sembramos las semillas de:
- En el plano físico: soltar la rigidez dedicando tiempo a flexibilizar y estirar el cuerpo a través del movimiento consciente. Cuidar la salud de las piernas para que nos ayuden a recorrer nuestro camino de vida.
- En el plano emocional: abrirnos a vivir la vida desde la aventura, conectarnos con nuestros dones y desarrollar paciencia y perseverancia para mantenernos en nuestro camino viviendo las dificultades como un desafío.
- En el plano espiritual: conectarnos con nuestro propósito de vida aquí en la Tierra.
Daniela Caronia, texto de la Agenda LuniSolar 2024
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